Hace tres meses, la vía Coyaima fue testigo de un devastador accidente en el que perdió la vida un niño de tan solo 11 años. Ahora, las comunidades l
Hace tres meses, la vía Coyaima fue testigo de un devastador accidente en el que perdió la vida un niño de tan solo 11 años. Ahora, las comunidades locales que exigen reductores de velocidad, demarcación adecuada y luminarias en esta zona, han emitido un ultimátum: 15 días para obtener una respuesta satisfactoria.
Ante la aparente falta de señalización y medidas de seguridad, las comunidades indígenas han manifestado su indignación y frustración. En un contundente mensaje, Flamino Loaiza, representante indígena de Coyaima, advirtió que si para el 3 de agosto no se resuelve esta situación, tomarán medidas drásticas y se lanzarán a las protestas.
“Estamos emitiendo este documento, han pasado tres meses desde que murió este niño y nadie ha hecho nada, la vía sigue igual y todo está sin una solución, por eso damos 15 días para una respuesta o nos iremos a las protestas”, enfatizó Loaiza.
La comunidad espera que las autoridades encargadas tomen acciones inmediatas para garantizar la seguridad vial en el área y evitar futuras tragedias. El tiempo apremia, y la demanda de una respuesta es clara y urgente.
La vida de un inocente niño se ha perdido, y ahora la responsabilidad recae sobre las autoridades para asegurar que ninguna otra vida sea puesta en riesgo por la falta de medidas adecuadas en esta transitada vía. La mirada de todo un pueblo está puesta en las próximas dos semanas, esperando que se haga justicia y se proteja la vida de los ciudadanos.
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